El Congreso de Estados Unidos dio un paso clave en la iniciativa que busca imponer un impuesto del 3.5% a las remesas enviadas por extranjeros, principalmente a países como México. Este jueves 22 de mayo, la Cámara de Representantes aprobó el plan fiscal impulsado por el presidente Donald Trump, en una sesión maratónica.
Con una votación muy cerrada de 215 a 214, el proyecto logró avanzar tras intensas negociaciones entre congresistas republicanos y la Casa Blanca. La medida forma parte del paquete bautizado por Trump como “el gran y hermoso proyecto de ley”, que incluye recortes fiscales y ajustes en el gasto público.
Trump busca que el impuesto entre en vigor antes del 4 de julio
El siguiente paso será en el Senado, donde los republicanos también tienen mayoría. Ahí se discutirá el proyecto con el objetivo de que quede aprobado y llegue al escritorio de Trump antes del Día de la Independencia de Estados Unidos, el 4 de julio.
Este nuevo impuesto afectaría directamente a millones de familias que dependen de las remesas enviadas desde EU a países como México, Guatemala y El Salvador. Aunque el texto legal no especifica el uso exacto de lo recaudado, Trump ha dicho públicamente que servirá para reforzar la seguridad fronteriza.
#ÚltimaHora 🚨 'Victoria' para Trump: 🏆 Los legisladores republicanos aprobaron el impuesto a las remesas con un recorte al 3.5%, propuesto en 5%, tras críticas de servicios financieros, así como del Gobierno de México.#PorLaMañana con Ciro Gómez Leyva (@CiroGomezL) pic.twitter.com/gSPKPAnMwe
— Grupo Fórmula (@Radio_Formula) May 22, 2025
¿Qué incluye el plan fiscal aprobado?
- Impuesto del 3.5% a las remesas enviadas por extranjeros
- Reducciones de impuestos a empresas nacionales
- Recortes a programas sociales y ciertos subsidios
El proyecto fue criticado por algunos republicanos por su posible impacto en el déficit fiscal, pero tras largas reuniones con funcionarios de la Casa Blanca, accedieron a apoyarlo con cambios mínimos.
La discusión en el Senado está prevista para la próxima semana. Si se aprueba sin modificaciones, podría entrar en vigor en cuestión de semanas.
Según una comisión independiente del Congreso, la extensión de las exoneraciones, junto con otras medidas fiscales, aumentaría el déficit federal en más de 4.8 billones de dólares en la próxima década.
El proyecto debe ahora pasar al Senado, donde los republicanos ya han expresado su disposición a realizarle cambios. Se espera que la Cámara Alta lo discuta durante al menos un mes y lo apruebe antes del 4 de julio.