La “Sábana Santa de Turín”, también conocida como “Santo Sudario”, “Síndone” o simplemente la “Sábana de Turín”, es un lienzo de lino con el cual, según las escrituras bíblicas, fue envuelto el cuerpo de Jesús de Nazaret después de morir en la cruz.
Si bien es una de las reliquias más apreciadas por los creyentes católicos por su estrecha relación con la pasión y muerte de jesucristo, también ha sido objeto de controversias y múltiples estudios que han buscado comprobar su autenticidad y vínculo con el llamado “hijo de Dios en la Tierra”.
Sábana Santa, ¿qué dice la ciencia del Santo Sudario?
A lo largo de los años, la Sábana Santa ha sido sometida a una serie de estudios científicos mediante los cuales se ha buscado comprobar su autenticidad y relación con Jesús de Nazaret. Desde fotografías, hasta rayos X y análisis forenses, son parte de las pruebas a las que ha sido sometida la reliquia de Turín.
- 1898 | Fotografía revela el rostro de un hombre
En 1898, el fotógrafo Secundo Pina, tomó la primera fotografía (daguerrotipo) de la Sábana de Turín, en ella descubrió que en los negativos era posible apreciar la imagen del hombre que fue envuelto en él.
Tras su hallazgo, Pina fue acusado de manipulador, sin embargo, 30 años después se comprobó la veracidad de sus afirmaciones, según indica la publicación de Aciprensa.

- 1930 | Estudio revela las verdaderas marcas de la crucifixión
Posteriormente, en 1930 el cirujano Pierre Barbet realizó una serie de experimentos mediante los que concluyó que las marcas de los clavos en la Sábana Santa correspondían con las heridas de la crucifixión, pero destacando que éstas no estaban en las manos sino en las muñecas.
Este hecho era hasta entonces desconocido y encuentra correspondencia médica en que no podrían estar en las manos debido a que el peso del cuerpo provocaría que se desgarraran.
- Rastros de sangre tipo AB
Otro descubrimiento fue realizado en 1978 por un equipo de 33 científicos de varias especialidades. Después de realizar cientos de pruebas, determinaron que las manchas de la Sábana de Turín eran de sangre humana tipo AB.
Y aseguraron que no se encontró ningún rastro de pintura o de otras sustancias químicas, indica la Universidad Autónoma de Guadalajara.
- La tela tiene al menos dos mil años de antiguedad
Un articulo publicado en la revista especializada Heritage demostró que aplicar rayos X en la Sábana Santa se encontró compatibilidad con la hipótesis de ser una reliquia de 2000 años de antiguedad y no de tela medieval como indicó un estudio realizado en la década de 1980.
- Coincidencias con la tortura
Un estudio publicado en 2024 reveló que las manchas presentes en la Sábana de Turín son consistentes con la tortura y crucifixión de Jesucristo, tal como se describe en los Evangelios.

¿En qué parte de la biblia se habla del Santo Sudario?
En las sagradas escrituras no existe una referencia exacta al Santo Sudario, pero si a una tela con la que envolvieron el cuerpo de Jesús después de ser bajado de la cruz en que murió.
Según el Evangelio según San Juan, en el capítulo 19, fue José de Arimatea, un discipulo de Jesús, quien solicitó a Poncio Pilato llevarse el cuerpo del nazareno para darle sepultura. Pilato accedió y José procedió a tomar el cuerpo de Jesús, el cual envolvió en lienzos de tela.
“40 Tomaron entonces el cuerpo de Jesús y lo envolvieron con vendas, agregándole la mezcla de perfumes, según la costumbre de sepultar que tienen los judíos. 41 En el lugar donde lo crucificaron había una huerta y en ella, una tumba nueva, en la que todavía nadie había sido sepultado. 42 Como era para los judíos el día de la Preparación y el sepulcro estaba cerca, pusieron allí a Jesús”.Evangelio según San Juan, 19:40
Una segunda referencia a la Sábana Santa en la Biblia es la mencionada en el capítulo 20 del mismo evangelio. En él, Juan explica que al tercer día de ser supultado, los discípulos acudieron a la tumba para descubrir que estaba vacía; señal de la resurrección de Jesús.
“1 El primer día de la semana, de madrugada, cuando todavía estaba oscuro, María Magdalena fue al sepulcro y vio que la piedra había sido sacada. 2 Corrió al encuentro de Simón Pedro y del otro discípulo al que Jesús amaba, y les dijo: ‘Se han llevado del sepulcro al Señor y no sabemos dónde lo han puesto’. 3 Pedro y el otro discípulo salieron y fueron al sepulcro. 4 Corrían los dos juntos, pero el otro discípulo corrió más rápidamente que Pedro y llegó antes. 5 Asomándose al sepulcro, vio las vendas en el suelo, aunque no entró. 6 Después llegó Simón Pedro, que lo seguía, y entró en el sepulcro; vio las vendas en el suelo, 7 y también el sudario que había cubierto su cabeza; este no estaba con las vendas, sino enrollado en un lugar aparte”.Evangelio según San Juan, 20:1

De acuerdo con la Universidad Autónoma de Guadalajara (UAG), la primera noticia que se tiene de la Sábana Santa se remonta a 1350 en Lirey, Francia, donde Geoffroy de Charny dijo tener la preciada reliquia y antes de morir la entregó a los monjes de su pueblo.
Posteriormente, el lienzo llegó a la Casa Saboya, que reinaba en un vasto territorio que incluía a Italia. Luego sobrevivió a un incendio y finalmente, en 1578, llegó a la Catedral de Turín que es donde se guarda y venera actualmente.